El circuito internacional de Buddh, sede del GP de India de F1 en el pasado, se ha convertido en una instalación para la cuarentena contra el coronavirus.
El trazado, de 5,14 km, albergó el GP de India de Fórmula 1 de 2011 a 2013. Ahora, acogerá a trabajadores migrantes que iban a dejar Delhi camino de sus hogares después de que el gobierno impusiera una cuarentena obligatoria de 21 días el pasado 25 de marzo.
India ha visto cómo los casos de Covid-19 han aumentado en los últimos días, con más de 1.300 –incluidas 32 muertes– hasta el viernes pasado por la mañana.
Las autoridades han alertado de dejar a decenas de miles de trabajadores abandonar la capital, ya que se arriesgan a extender el virus en poblaciones pequeñas y aldeas vecinas del estado de Uttar Pradesh.
Así, la ciudad deportiva Jaypee, que incluye al circuito internacional Buddh, servirá como asentamiento temporal para estas personas hasta que el confinamiento acabe el 14 de abril.
El corazón de la instalación, incluyendo el propio trazado, será acordonado, pero las autoridades locales aún confían en hacer espacio para 5.000 personas en la ciudad deportiva, según informa la prensa local.
La decisión de convertir este centro en una zona de cuarentena llegó un mes y medio después de que las autoridades sellaran el circuito por una falta de pagos que se elevaba a 600 millones de rupias ( de euros). La pista, sin embargo, ha seguido albergando varios eventos de motor desde entonces.
El circuito de Buddh ha albergado pocas competiciones desde que se cayera del calendario de la F1 en 2014, siendo el campeonato Asia Road Racing y el MRF Challenge las dos únicas categorías internacionales que regresaron al trazado en los últimos seis años.